Durante el último año en España se ha triplicado la práctica de los Deportes de Aventura. Cabría preguntarse por qué, teniendo en cuenta el nivel de tensión y preocupación en el que vivimos la mayoría de los españoles. Realmente ¿hay hueco para añadir más riesgos a nuestra vida?, ¿qué nos pueden aportar este tipo de actividades? Y respecto al Sector Asegurador, ¿tienen cabida los Deportes de Aventura si contemplamos los riesgos que conllevan?
Los Deportes de Aventura proporcionan una liberación de estrés acompañado de sensaciones de gran bienestar físico y especialmente psicológico. El motivo de ello son dos sustancias que genera el cuerpo en situaciones que suponen un reto e incluso cierto peligro: la adrenalina y las endorfinas. La liberación de adrenalina producen un estado momentáneo de euforia, máxima energía y capacidad de acción para dar paso, a continuación, a la agradable sensación de relax y felicidad que genera la liberación de endorfinas posterior.
La crisis actual propicia el aumento en la práctica de este tipo de deportes porque son una vía de liberación, de catarsis, perfecta y asequible: nos encontramos en un país con un altísimo nivel de paro, con mucha inseguridad social y una gran incertidumbre laboral, y eso genera mucha tensión, preocupación y estrés. Por otro lado, esta situación de crisis hace que, los que todavía se pueden permitir un capricho en vacaciones pero ya no pueden optar por viajar al extranjero (o incluso a una zona diferente a la de su residencia), se decanten por este tipo de actividades como sustitutas ideales para vivir una experiencia memorable que rompa la rutina, libere tensiones y les permita retomar su vida cotidiana con buen feeling.
Parece que la crisis, que tantos disgustos nos da, ha generado un negocio que no deja de crecer y conlleva beneficios en cadena: más gente que quiere desconectar y relajarse a través de experiencias únicas y asequibles económicamente como los Deportes de Aventura, lo cual exige más entidades organizándolos y, por lo tanto, más seguros para llavarlos a cabo de una fórma óptima y, por supuesto, legal. Nace un nicho de mercado, el Seguro de Aventura, en el que se especializan cada vez más corredores.
¿Qué es un Seguro de Aventura y a quién está dirigido?
El Seguro de Aventura es un tipo de póliza que cubre tanto a los practicantes de actividades y deportes de riesgo, como a los organizadores e instructores de los mismos, protegiéndoles de cualquier tipo de imprevisto que pueda surgir en la práctica de este tipo de actividades incluyendo servicios médicos, evacuaciones de emergencia, transporte sanitario,.. con coberturas como fallecimiento por accidente, invalidez absoluta o responsabilidad civil, entre otras.
Normalmente son productos estandarizados que se adaptan a las diferentes situaciones pues, evidentemente, no tiene nada que ver los riesgos a los que se enfrenta un submarinista deportivo en relación a los que vive un practicante de Ttrekking. Aunque también se pueden encontrar paquetes a medida, en función de las necesidades del cliente o la actividad concreta.
La contratación de este tipo de pólizas puede ser tanto a nivel individual como por parte de una asociación o club. Sin embargo, presentan un pequeño hándicap en cuanto al precio de las mismas, ya que nos encontramos en un ámbito de alta siniestralidad, no tanto por el alcance de los daños como por la frecuencia en la que éstos se producen. Debido a ello pocas aseguradoras quieren entrar en este negocio y los productos aún son escasos, por lo que es conveniente la ayuda de un buen asesor que oriente y conduzca al cliente hacia la póliza que más le convenga en función de sus necesidades. De nuevo el papel del mediador es crucial, pues nos encontramos ante riesgos muy peculiares que exigen un correcto análisis tanto a nivel de practicante como de organizador.
El Deporte, una vez más, es una buena noticia para nuestro país, en este caso para la economía, aunque sea a pequeña escala y en un ámbito reducido. Los Deportes de Aventura suponen un mercado en crecimiento en el que el Sector Asegurador, con toda probabilidad, estará cada vez más presente.