Los Seguros Multirriesgo son contratos que cubren riesgos materiales y patrimoniales, reuniéndose en ellos garantías y coberturas de diversas pólizas en un único documento. Desde su nacimiento, este tipo de seguros ha ido aumentando su nivel de aseguramiento y de servicios asistenciales, adaptándose cada vez mejor a las necesidades segmentadas del mercado.
Una de las ventajas principales de estos seguros es la segmentación ya que los seguros multirriesgo han especializado su oferta en mercados muy determinados y definidos, e incluso hacia objetivos muy concretos. En función de esto, aunque quizá el seguro multirriesgo más conocido sea el de Hogar, también existen otros productos en el mercado como los seguros multirriesgo de Comunidades, Industriales, de Comercio o de Pymes, productos en los que las aseguradoras realizan agrupaciones detalladas en cuanto a las características de los riesgos.
Estructura básica de las pólizas multirriesgo
Los seguros multirriesgo se caracterizan por una gran flexibilidad, ya que a partir de unas coberturas básicas, por lo general, de contratación obligatoria, el asegurado puede elegir la cobertura de otros riesgos personales o más concretos, según sus propias necesidades de aseguramiento. De esta forma, en cada póliza se pueden encontrar:
- Garantías Básicas: de contratación obligatoria. Se incluirían dentro de estas el incendio y riesgos complementarios al mismo (explosión, implosión … ), el robo, tanto del hecho en sí como de las consecuencias que se deriven (daños).
- Garantías de libre contratación: se contratan aquellas que mejor se adapten a los riesgos de cada cliente.
Clases de pólizas multirriesgo
La principal clasificación de los seguros multirriesgos es la que se basa en la actividad desarrollada en el inmueble o instalación objeto del seguro, pudiendo ser:
- Pólizas sencillas o para riesgos sencillos: en el inmueble asegurado no se realizan actividades industriales tales como fabricación, elaboración, transformación manipulado u otros similares, de productos o mercancías. Sería el caso del multirriesgo del Hogar, de Comunidades y de Comercios.
- Pólizas industriales: en el inmueble o instalación asegurada se realizan actividades tales como fabricación, elaboración, transformación o manipulado de productos o mercancías. Pueden existir tantos tipos de pólizas combinadas como actividades industriales, empresariales o comerciales podamos imaginar.
Variedad, versatilidad, flexibilidad son las claves de este tipo de seguros creados para adaptarse a las perculiaridades de cada riesgo y a las necesidades de cobertura en cada caso particular. En cualquier caso, antes de contratar una póliza es muy recomendable conocer perfectamente las coberturas que se están pagando y, como no, recurrir a un mediador que asesore correctamente en la contratación.